miércoles, 3 de febrero de 2010

Avatar


Año 2154. Pandora, una luna del planeta Polifemo habitada por los Na´vi (y otras fantásticas criaturas).
Un grupo de científicos y un grupo de militares llegan a ella para establecer contacto con los Na´vi: seres muy parecidos a los humanos de color azul.
Los científicos para adquirir conocimientos sobre el lugar y los propios nativos, los militares para conseguir un valioso mineral que solucionaría los problemas energéticos de la Tierra. El problema es que el mayor yacimiento de ese mineral se encuentra bajo un inmenso árbol donde viven los Na´vi...

Jake Sully, un marine que quedó parapléjico es seleccionado para participar en Avatar, un proyecto que transporta la mente de los humanos a cuerpos Na´vi artificiales para que la comunicación entre humanos y nativos sea más fácil. De este modo, Jake descubre una forma de vida desconocida al tiempo que se enamora de la hija del clan Na´vi. Un nuevo mundo se abre ante él...


Un nuevo mundo o El Nuevo Mundo para ser más exactos ya que lo último de James Cameron (Titanic, Alien 2 y 3, Terminator 1 y 2) podría pasar por la historia de Pocahontas. La originalidad no es el punto fuerte de la película que avanza de tópico en tópico con estereotipados personajes como protagonistas.

Tenemos:
- El héroe encarnado por Sam Worthington (Terminator salvation), tan plano como mármol recién pulido.
- La Ella, comprometida con otro (estas cosas nunca pasan en las películas) pero que se enamora del protagonista (por algo es el prota).
- La única persona (aparte del héroe) que piensa que los Na´vi tienen el mismo derecho a vivir en su tierra aquí representada como un pequeño grupo de científicos que ni pinchan ni cortan liderados por Sigourney Weaver.
- El malo malísimo (militar para más inri), un estereotipo andante que podría pasar como gobernador Ratcliffe sin problemas. Racliffe - por si hace tiempo que no veis Pocahontas - era el malo de la película y al final casi mata al prota. Pero esa es otra historia y cualquier parecido con esta es pura coincidencia... ¿no?
Finalmente como personaje adicional aparece Giovanni Ribisi (el hermano de Phoebe en Friends) en su papel de siempre.


Todos ellos se mezclan en una cocktelera y... nada. Un maravilloso envoltorio: tecnología inovadora a tutiplén, efectos increibles, paisajes de ensueño, flora y fauna que biólogos y amantes de la biología les matarían por estudiar y una banda sonora bastante buena. Nada más. No hay que buscar más allá de los efectos especiales porque solo encontraremos una historia predecible en la que nada de lo que hagan los personajes podrá sorprendernos porque muchos otros ya lo hicieron antes.

Entretenida sin más. Perfecta si unícamente se busca espectáculo visual, si no, "Bailando con lobos" o "Pocahontas" para quienes gusten de los clásicos disney son mejores opciones.